Meike
Weinzierl
El 11 de octubre el
presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, visitó a la canciller alemán
Ángela Merkel en Berlín. Antes de empezar su mandato el 1 de diciembre, ya ha
viajado a países latinoamericanos y más recientemente hizo una gira por Europa
para establecer relaciones con los jefes de Estado más importantes. Pero aun
fuera de su país y fuera de su continente, Peña Nieto fue recibido por grupos
de manifestantes que están en contra de él como persona y como político. El #YoSoy132 también existe en Alemania.
Pero la prensa alemana se quedó al margen del encuentro de los dos políticos y
sobre todo, no hablaron de las manifestaciones.
En el aeropuerto Tegel de
Berlín, Peña Nieto y su esposa Angélica Rivera fueron recibidos por el
embajador mexicano Francisco González Díaz. Esa misma noche se escucharon
protestas delante del hotel en el que se alojó la pareja. Al día siguiente,
cuando tuvo lugar la reunión privada de Merkel y Peña Nieto, había otras
manifestaciones frente a la embajada de México en Berlín. Fueron organizadas
por dos grupos: #YoSoy132Berlín y
México vía Berlín. Las protestas se dirigieron en contra de sus planes de
reformas estructurales, le acusaron por fraude electoral y particularmente por
violación a los derechos humanos.
Sobre todo lo mencionado
existen comentarios en páginas web de grupos alemanes que se interesan por
temas latinoamericanos como america 21, ¡Alerta! y WirNosotros. Además aparece una nota de prensa en la página web del partido político alemán de los
Verdes (Bündis 90. Die Grünen), cuyo énfasis está en la política del medio
ambiente. Pero nada en los periódicos. Nada en los semanarios. Nada en Spiegel, que es la revista más crítica y
que normalmente sí se interesa por temas como el narcotráfico o la corrupción
en México. En los periódicos sólo escribieron sobre lo que hablaron Merkel y
Peña Nieto: las relaciones comerciales entre Alemania y México, y cómo México
podría mejorar su política energética en cuestión de las energías alternativas
en un tiempo futuro.
A mí me parece raro que la
prensa alemana no haya mencionado nada sobre las manifestaciones ocurridas en
estas fechas. Si yo fuera periodista en Alemania sí que me hubiera llamado la
atención que un grupo de alemanes y mexicanos llevara carteles de #YoSoy132, aunque yo aún no sepa lo que significa eso. A
mí sí que me hubiera llamado la atención que un grupo de personas estuviera
gritando “Tell everyone that democracy in
Mexico is fraud!” en frente de un futuro jefe de Estado. A mí sí que me
hubiera llamado la atención que un presidente electo tuviera que salir por la
puerta de atrás.
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